Meteo y ritmo ideales

11/04/2010 11:42


El frente frío que persigue al Estrella Damm y al W Hotels desde la salida ya está sobre los barcos. Gracias a la velocidad con que han navegado durante estos días esta variable meteorológica los alcanzará sólo esta tarde, en el momento perfecto, justo al entrar en el anticiclón de Azores. A partir de entonces, los regatistas navegarán con vientos de entre 15 y 20 nudos que les permitirá atravesar la alta presión manteniendo un rumbo directo a Gibraltar sin ningún tipo de desvíos en su ruta, en una situación ideal.

La media de 460 millas para las 24 últimas horas que han realizado el Estrella Damm y el W Hotels es digna de admiración. Los dos barcos han navegado a más del 90 por ciento del máximo rendimiento que ha tenido un IMOCA Open 60 en la historia de la clase. En el último día han hecho apenas 50 millas menos que el Hugo Boss cuando realizó el récord de navegación de 24 horas (501,3 millas).

Esta velocidad, gracias a la cual ya han realizado más de una cuarta parte del recorrido, les habrá permitido, esta tarde, plantarse frente al anticiclón de las Azores en tres días. Y será justo en ese instante cuando el frente frío que los persigue desde Nueva York los alcance por popa. Esta circunstancia hará que los veleros entren a la zona de la alta presión con vientos que caerán a 15 nudos, pero que no desaparecerán completamente como es habitual. Gracias a ello podrán mantener un relativo buen ritmo de navegación y atravesar en un día, o poco más, una zona que normalmente es de encalmadas.

Tras tres días de ritmo estresante y al límite, con rociones y olas barriendo la cubierta incesantemente, un día de vientos de 15 nudos y sol será seguro el deseo de los seis tripulantes. Podrán reponer fuerzas, reparar cualquier pequeña avería que hayan sufrido los barcos y prepararse para la siguiente depresión que los tomaría entre Azores y Madeira. Esa baja los recibiría con vientos, que tras haber rolado por su popa, la aleta y el través de babor (habiendo dado la vuelta a todo el barco) los cogería por la amura de babor (parte más cercana a la proa). Entonces, una pequeña caída al sur les permitiría volver a tener el viento por el través de babor (perpendicular del barco) y en rumbo casi directo a la entrada del estrecho.


Fuente Info: NY-BCN